sábado, 20 de julio de 2013

A TU LADO ( SYPHON Y AMALYA)


VIENE DE : MIA

SYPHON:* Suspiro, quitándome de encima para no aplastarla y sonrió con un deje de tristeza.*

-Lo sé...Aunque nuestras razas sean iguales, no pertenecemos al mismo mundo, , hermosa directrice... Yo soy un guerrero, y tu una escriba...

*Pienso en mi trahyner Zypher y ahora sé lo que debía de sentir el por esa hembra Bloodletter y se me escapa una lagrima, que rueda solitaria por mi mejilla.*

-Maté a mi mejor amigo, por vincularse con una hembra con la que no podía estar. Y ahora soy yo el que ha hecho lo mismo... Siento que tu primera vez haya sido con alguien tan detestable como yo...

* me inclino y beso su hombro, guardando en mi memoria cada rasgo de su hermoso rostro y cada cuerva de ese cuerpo suave y esbelto.*



AMALYA: *Lo miro tristemente y antes que se aleje tomo su rostro entre mis manos y beso sus labios*
- No lo digo por eso Syphon, sé que eres un bastardo y que tienes una guerra contra nuestro rey pero deja fuera todo eso. Eres un macho muy bueno que a veces tiene errores, solo eso.
*veo como niega y sonrío*
- ¿no me dijiste que lo habías matado para que no sufriera?
*cuando asiente acaricio su pelo*
¿Ves? a pesar de todo miraste su sufrimiento. Eres un gran macho Syphon y me alegro que me hayas enseñado lo que no voy a poder tener nunca.
*suspiro tristemente*
- Yo misma me recluí a ser escriba y es ahí donde permaneceré.

SYPHON: * Sorprendido la miro sin poder creerme lo que me esta diciendo.*

-¿ Y por qué hiciste eso, Amalya? Quiero decir... Eres una hembra hermosa, y de gran valía... No entiendo por qué renunciaste a nuestro mundo...

* No lo entiendo, por mucho que me esfuerce y me estruje los sesos pensando en esa elección, no doy con el motivo.

Entrelazo mis dedos con los suyos y alzo mis ojos hacia ella.*

- Eres muy bonita y de gran corazón... Y no comprendo por qué elegiste quedarte en el otro lado, rodeada de pergaminos...

*Sonrío al recordar como a veces en el campamento soñábamos como debían ser las Elegidas, si eran reales y de verdad servían a la Hermandad, y me rio cuando oigo claramente en mi mente la voz de Zypher diciendo que la directrice debía de ser un cardo borriquero, vieja, chocha y amargada.*

AMALYA: *me encojo de hombros*
- La hermandad ya casi ni nos usa. Muchas anhelábamos tener un macho que nos cuidara, que nos necesitara y nos diera hijos pero eso fue desvaneciéndose cuando vimos que nadie venia por nosotras.
Cuando llegue a ser la Directrix me quedo claro que nunca iba a poder satisfacer a un macho así que me recluí.
*me sonrojo un poco*
- No soy hermosa Syphon. Mis hermanas lo son, ellas son realmente extraordinarias.

SYPHON: * Cojo su rostro entre mis manos y acerco sus labios a los míos, besándola con suavidad.

Me separo lo justo para mirarla y acaricio su pelo con mi mano, para acuñar de nuevo su mejilla contra mi palma.*

-No me puedo creer que los hermanos no vinieran a por vosotras. Sobre todo a por ti... Ninguna de tus hermanas puede ser más bella, Amalya...
He visto y he tenido a muchas hembras durante todos estos siglos, pero jamás vi a una tan hermosa como tu...

* De repente siento rabia hacia la Hermandad... Ellos siempre han tenido lo que han querido, y han despreciado lo que se les ofrecía por derecho y nosotros, que hemos peleado por la misma causa que ellos durante años, nos hemos visto apartados como si fuéramos parias por el simple hecho de no creer en la monarquía del rey Wrath.*

- Los Hermanos están sobrevalorados... Nuestro sire, el Bloodletter tenía razón al decirnos que los machos debían de ser dignos por su valía en el campo de batalla y no por linaje. Aunque muchas de sus ideas, no fueran las mías, con el paso de los años he comprendido que en algo si tenía razón ese maldito cabron... Todos luchamos por la misma causa y somos tan dignos como cualquiera que pelee en contra de la causa del Omega y de su odio hacia nuestra raza.


AMALYA:  *Sonrío un poco*
- Los hermanos están felizmente casados Syphon, adoran sus esposas y le son fieles a ellas. Incluso el primale ha elegido ese tipo de vida y nos ha permitido a nosotras vivir donde queramos. Además de protegernos para que nadie nos lastime.
*Me recuesto bien en la cama y veo como se acomoda a mi lado. Me acerco a su cuerpo sintiendo su calor*
- A lo mejor si ustedes pudieran hacer una alianza con la hermandad podrían tener acceso a sus beneficios. No tienen por qué matar al Rey si luchan por la misma finalidad ¿no?

SYPHON: * Me encojo de hombros y la miro fijamente.*

- Yo solo sigo ordenes... Sin cuestionarlas. No podemos desobedecer a nuestro Sire. Le juramos lealtad a los pies de las cenizas del Bloodletter, y lo que dice el sire, es ley... Vosotros tenéis al rey ciego, y nosotros a nuestro líder.
Crecimos con unos ideales distintos, y de donde nosotros venimos, ni vuestra religión ni vuestra monarquía significaban nada para nosotros.
Aunque...

*Pienso en aquella vez, hace ya tanto, cuando Xcor apuñaló a Throe y lo dejó abandonado a su suerte y en como mis hermanos y yo, estábamos dispuestos a derrocar a nuestro líder por ese acto que considerábamos traición y suspiro, frotándome la cara.*

-No podemos desobedecer... Si lo hacemos somos castigados.

AMALYA: * Lo miro y me pregunto porque todo tiene que ser tan complicado.
Decido que es mejor que no pensemos mucho en eso.
Me acurruco a su cuerpo y beso su mejilla*
- No perdamos el tiempo en algo que no podemos cambiar solos.
Debes descansar Syphon. Luchas todas las noches y necesitas estar bien
* muerdo mi labio dudando como se va a tomar esto*
- ¿podríamos dormir juntos durante el día ? No voy a tomarlo como compromiso. Solo quiero saber cómo se siente.
*bajo mis ojos a su pecho y paso mi mano por allí sintiéndolo *

SYPHON: * Cojo su mano entre las mías, y asiento, buscando sus labios.
Cuando estoy casi pegado a su boca, susurro.*

-Podemos dormir, dulce directrice... Si esta va a ser nuestro único día juntos, quisiera que lo aprovecharas al máximo, y si dormir es lo que quieres, entonces, dormiremos.

* La beso con dulzura, casi sin reconocerme, y sonrío. Lo que siento con Amalya, no es nada comparado con lo que he sentido con otras hembras, ni siquiera con Star, por que la elegida es solo mía... MIA, y pienso que si no estuviéramos en esta maldita guerra, quizás las cosas fueran distintas para nosotros.*

AMALYA:  * cierro mis ojos y siento sus brazos rodeándome mientras cubre nuestros cuerpos.
Suspiro*
- Tal vez mas tarde podamos repetir lo que me enseñaste. Ahora quiero descansar un poco.
*relajada y confiando en este macho me duermo con sensaciones nuevas y deliciosas *

SYPHON: * Completamente relajado, la envuelvo entre mis brazos y la sostengo, con su cabeza en mi pecho, mientras oigo como su respiración se vuelve más suave y sonrío, apartando su pelo para observar sus dulces rasgos.

Al final, el cansancio y las emociones del día pueden conmigo y caigo dormido, en un sueño profundo del que no había disfrutado en toda mi vida.*

CONTINUA EN: EN LAS REDES DEL PLACER

Licencia de Creative Commons

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

No hay comentarios:

Publicar un comentario