CONVERSACIONES EN EL DESAYUNO ( SYPHON Y AMALYA)

 

SYPHON VIENE DE: TRAHYNERS CON CONDICIONES

AMALYA VIENE DE: BAJO LA AURORA BOREAL

SYPHON: *Me despido de Zypher con un movimiento de mi cabeza y al ver a Amalya todos mis males se disipan.

Mi leelan, ni shellan, mi todo.

Me levanto y aparto la silla para que se siente y sonrío, poniéndole una taza de café caliente.*

- ¿Como estas, mi preciosa?

* Susurro en su oído mientras corro la silla para acomodarla a la mesa y me siento a su lado, partiendo un bollo de chocolate y dándoselo a comer de mi mano, como manda la costumbre.*

AMALYA: * Abro mi boca y muerdo un bocado. Estoy sonrojada pero sonrío. Syphon se creía indigno pero era un macho maravilloso*

- Estoy bien Syp. Iba a ver las luces de afuera.

* Lo miro atentamente y toco su rostro*

- ¿Cómo éstas tú?

SYPHON: - Supongo que mejor que anoche. Aunque todavía me duele un poco la mandíbula y la nariz.

* Parto otro trozo de bollo y lo pongo en sus labios, mirándola completamente enamorado.*

-¿De qué habéis hablado tú y la hebra de Zypher?
Os he oído desde aquí, pero no he podido escuchar mucho.

* Me pongo rojo de vergüenza, pensando si ella creerá que la he espiado y bebo un sorbo de mi taza de cafe.*

AMALYA: *Me anoto mentalmente que tengo que preguntar si tenían cosas de primeros auxilios para poder curarlo mejor.

Sonrío ante su sonrojo mientras mastico, cuando trago lo que me ha dado, beso sus labios suavemente*

- Sólo estaba asegurándome que mi hermana entendía mi posición contigo. Y cómo me hubiera afectado tu muerte

* Me levanto de la silla y me siento en su regazo. Agarro un pedazo de bollo y se lo doy en la boca. Al principio se resiste un poco pero finalmente lo toma.

Sonrío feliz*

- No tienes idea lo feliz que estoy que no te hayas ido al Fade. Me asusté mucho anoche.

* Tan solo recordarlo se me llenaban los ojos de lágrimas*

SYPHON: *Muerdo el bollo y con mi pulgar recojo la lagrima que se le cae y sonrío besandola.*

- Eso es pasado, leelan... Ahora estamos aquí y ahora y vivos, gracias a la Virgen. Y me alegro de que tu hermana haya sido comprensiva, porque por lo que veo, sigues entera.

*Sonrío y lleno de nuevo su taza de café y aparto su pelo de su cara, mirandola.*

- Me gustó verte enfadada. Me habían dicho que las hembras de vuestra posición eran sumisas, pero ya he podido comprobar en mis propias carnes, que solo cuando nadie os cabrea.

* Me rio de la cara que pone y apoyo mi frente en la suya.*

- Le he dicho a Zypher lo de Layla y el Sire, pero él ya lo sabía. Lo sabía y el muy cabrón nunca dijo nada.

*Me quedo pensativo unos momentos y veo como el lobezno que está a mis pies, sale disparado escaleras arriba.*

-¿Has visto que tienen un lobo de mascota?

*Estallo en risas.*

-Joder, mi trahyner y su leelan están como dos putas cabras.
¿Y tú como estás hoy, mi preciosa shellan?

AMALYA: *me sobresalto al sentir el movimiento de ese animal.

Me quedó mirándolo hasta que sale de nuestra vista y vuelvo a mirar a Syphon al oír su voz*

- estoy bien. Por lo menos ya no estoy cabreada contigo.

* sonrío ante su gesto*

- Más te vale recordar lo peligrosa que soy cuando me enojo.

Aunque sería bueno que aprendiera algunos movimientos de defensa.

* beso sus labios antes de tomar un poco de mi café. Suspiro ante el sabor*

- creo que me volví adicta a esto.

* veo como frunce el ceño y lo miro divertida*

- No tanto como a mi hellren pero debes admitir que esta bebida es deliciosa.

SYPHON: *Sonrío y la beso, mientras sirvo más cafe.*

- Me gusta el café, pero me gusta más el sabor de tus labios.

* La beso con dulzura y le ofrezco otro trozo de bollo.*

-¿Así que te ha molado lo de arrearle a la gente con un palo?

*Me da un ataque de risa y cuando me calmo la miro.*

-¿quieres que te enseñe algún tipo de defensa? Eso sí, nada de usarla conmigo.

AMALYA: *hago una mueca*

- El palo no sirvió mucho con Zypher. Seguía con fuerzas.

* Sonrío ante su sugerencia *

- Lo voy a usar contigo si te portas mal.

* Su expresión es toda una tentación pero intento no reírme y mantener mi cara serena*

- Aunque si no quieres puedo pedirle al Primale o alguno de los hermanos que lo haga.

SYPHON: *Estallo en carcajadas, mientras bebo el café y la miro.*

- ¿Vas a mandar a alguien de la Hermandad a que golpe a un bastardo con un palo?

* Sin querer, y debido a la risa, le doy un manotazo a la taza, y derramo el café y me rio mas.*

-Amalya, un palo, no es un arma si no está en manos expertas. Y no quiero que mandes a nadie. Yo te enseñaré a protegerte.

* La beso y le doy otro trozo de bollo, mientras recupero la taza y la relleno de cafe.*

-¿Y cómo te ha ido con la hembra Bloodletter? Os he oído hablar, pero mi oído no es tan fino como mi vista desde lejos.

AMALYA: - voy a pedirle a alguien de la hermandad a que me enseñé a defenderme

*bebo un poco de café y suspiro al pensar en la charla con Payne*

- creo que fue buena. Payne siempre fue más distante y con carácter que las demás. Pero en parte la entiendo.

*acaricio el rostro de Syp*

- Yo hubiera reaccionado de la misma forma si creyera que tú éstas en peligro.

* muerdo mi labio*

- fui muy cruel con ella y las cosas que le dije.

SYPHON: -Pues quizás deberías disculparte... Ella es tu hermana, al fin y al cabo. A veces tenemos que tragarnos nuestro orgullo, Lya. Es lo que hay. Al in y al cabo ellos viven tranquilos aquí, y nuestra presencia puso en peligro la muralla que ellos han construido a su alrededor...Si alguien intenta hacerte daño, yo también le mataría.

*Acaricio su pelo y la beso suavemente.*

- Y si alguien tiene que enseñarte a pelear, no va a ser la Hermandad, leelan. Te voy a enseñar yo, que para algo soy tu macho.

*Rio acunando su cara entre mis manos.*

AMALYA: *Sonriendo por sus palabras aprovechó para acariciar su pelo*

- voy a hacer que cumplas esas palabras.

* termino mi café y lo miro ilusionada*

- ¿Podemos ver las luces del cielo? Payne me dijo que son comunes en estos lados pero quiero verlas hoy.

* uno mis manos como una súplica *

- ¿podemos ir?

SYPHON: *Sonrío como un bobo sin poder negarle nada a mi hembra y me levanto de mi silla, cogiendo su mano. *

-Claro. Vayamos., pero abrígate, que fuera hace un frio de cojones.

* Sonrío, cuando ella asiente y rodeo sus hombros con mi brazo a la vez que veo a la cosa peluda entrar de nuevo en la cocina y me rio.

¿Quién me iba a decir a mí que mi trahyner terminaría teniendo un jodido lobezno como mascota? Cuando este bicho crezca, será grande como un caballo y sigo riéndome al imaginarme a Zypher y su amenaza de que si lo traiciono vendrá a por mí, azuzándome a su lobo para que me devore.*

CONTINUARÁ…

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