BAJO LA AURORA BOREAL ( PAYNE Y AMALYA)

PAYNE VIENE DE:Dolor y Placer

AMALYA VIENE DE:Rompeme, rasgame, pero no me ignores, no mi vida.

AMALYA: *Syphon no estaba.

Suspiro y me estiro en la cama, eso debía decir que ya estaba bien. Lo cual era un alivio. Me había asustado mucho ayer.

Me levanto y me pongo la ropa que había traído ayer, no estaba tan sucia. ME calzo y me pongo uno de los abrigos que Syp trajo.

Un brillo en la ventana llama mi atención, me acerco y descorro al cortina para poder ver unas luces hermosas en el cielo. ¿Qué era eso?

Solo lo pienso un minuto, quería salir a ver. No creo que mi hellren se moleste por eso...si es que podía salir de aquí.

Lavo rápidamente mis dientes y me peino. Me aseguro de estar bien abrigada y salgo de la habitación para no perderme semejante fenómeno.

Sin darme cuenta choco con alguien que se queja.

Instintivamente sostengo a la persona hasta que veo los ojos de Payne mirarme. La suelto y me alejo un paso*

- Lo lamento...no quería golpearte.

* Bajo la vista acallando mis emociones.

PAYNE: * Miro a Amalya y tardo varios segundos en reconocerla. Parpadeo y por fin mi cerebro se ubica. Estaba dando vueltas por la casa sin saber ni donde estaba ni donde iba . Sin saber si estaba sola o con quien debía estar.

Todo está confuso en mi cabeza como si me hubiera bebido una caja entera del vodka. Pero hay algo distinto, el peso, la culpa que siempre tengo en mi pecho...parece ahora ligera, no tan dura de llevar.

Miro a Amalya...¿ Amalya, que hace aquí la directriz?*

-No me golpeaste...¿ que estás haciendo en mi casa Amalya? No sé..

* De repente un flash coloca todo en su sitio y recuerdo lo acontecido la noche anterior y me tambaleo y necesito sujetarme a la pared. Necesito respirar también porque de repente el aire del mundo parece insuficiente.

Me concentro en respirar hasta que por fin vuelvo a tener el control de mi cuerpo*

- ¿ Cómo Esta Syphon? ¿ Pudo recuperarse? 

*Pregunto tranquila, con amabilidad . No busco pelea, ya no...Lo que Zypher me hizo, me liberó de mucho odio, largos años acumulado hacia mí misma. Levanto mi vista y encaro la suya. No voy a esconderme porque quiero dejarle claro a Amalya que no soy la cobarde que cree que soy. De repente la sabana que llevo al rededor se desliza de mi cuerpo y corro a cubrirme con él. No quiero que vea las heridas que aún no han terminado de cicatrizar.*

AMALYA: * miro el piso y me froto los brazos estando un poco incómoda. Payne podría matarme si quisiera*

- supongo que está bien. Cuando me levante ya no estaba.

* La siento quedarse en silencio y quiero escapar. Realmente no quería lastimarla y ella no me quería aquí... ni ella ni Zypher*

- Nos iremos ni bien podamos. No los molestaremos nunca más... yo solo iba a mirar las luces que vi afuera.

* murmuro y tengo ganas de pegarme ¿ por qué no puedo decirle las cosas cuándo estoy tranquila ? Actuó como siempre lo hice , como la modesta directrix y hermana*

PAYNE: * Noto su incomodidad y la comprendo. Yo también estoy incomoda conmigo misma...ahora, al menos, ya no me odio*

- No hace falta que os vayáis. La casa es muy grande y podéis quedaros cuanto queráis . 

* Miro por la ventana de la puerta de cristal y observo como el cielo va cambiando de color *

- Es la aurora boreal lo que ves. Es una maravilla de este lado a esta latitud. No hay nada parecido en el santuario.

* Sigo notando que no está a gusto con mi presencia y me resigno. Pero antes quiero dejar algo claro. No está en mi naturaleza lo que voy a hacer, pero después de lo sucedido con Zypher, me nace de dentro el querer hacerlo*

- Siento mucho lo de antes. Sé que ahora debes odiarme por querer matar a tu macho, pero no pude reaccionar de otra manera. Tu hellren había matado al mío y eso se paga con sangre allá donde nací y me crie. Que por cierto es el mismo lugar que el tuy.

* Me paro un momento porque estoy volviendo a ser la de antes y ahora quiero ser una vampira nueva. Zypher no ha tenido que sufrir por nada*

- Es mi manera de pedirte disculpas Amalya, pero si necesitas que lo haga como dictamina la ley del santuario lo haré.

* Hablo en lengua antigua y me inclino mientras hablo y caigo de rodillas *

- Os ofrezco mis más sinceras disculpas ante el agravio que os ha supuesto mi actuación. Estoy a vuestra disposición para que dispongáis el castigo justo, Querida Directriz.

* No soy ya una elegida pero usar una fórmula de ellas me parece ahora lo correcto*

AMALYA: *jadeo y niego*

- ¿qué estás haciendo? no...

* Me arrodillo a su lado y trato de levantarla pero me cruzo con esos ojos. Respiro profundo y me armo de valor, lo que a veces me faltaba*

- No te odio Payne, no podría hacerlo...eres mi hermana. Pero me dolió mucho que no te importara que vea morir al macho que amo.

Sabes mejor que nadie lo solas que podemos llegar a estar.

Yo me había recluido porque ya no tenía esperanzas que nadie me quisiera ni me usara.

Cuando encontré a Syphon sólo quería saber lo que se sentía ser deseada.

* sonrío con melancolía*

- Él me enseñó mucho más. Es un bastardo...y casi mata a Wrath. Sé que estoy jugando con fuego pero no puedo evitar amarlo.

Y ustedes solos iban a matarlo delante de mí .

* El recuerdo me cierra la garganta*

- Vi cómo sentías el vacío cuando Zypher murió....¿por qué deberías condenarme a mí a pasar por eso? ¿Me hubieras matado con él, como te lo pedí?

* La miro atentamente intentando entenderla*

PAYNE: * Cierro los ojos. *

- Te hubiera matado sin dudar Amalya. No creas que soy una elegida más, no lo soy...por mis venas corre la sangre más cruel que ha corrido por las venas de los vampiros. Y sé perfectamente lo que se siente cuando tu macho muere ante tus ojos...así que sí, te habría matado sin pensármelo Amalya .

AMALYA:- Sé de quién eres hija Payne, soy la directriz y una escriba. Eres mi hermana , no cambia nada el hecho de tu concepción.

*apoyo mi mano en su brazo para que me mire. Le sonrió *

- entonces te lo agradezco. Hubiera estado feliz al irme con él.

* Ahora era mi turno de sincerarme*

- lamento las cosas horribles que dije Payne. Fue un acto despreciable de mi parte.

PAYNE: * Abro los ojos y la miro*

- No las lamentes. Eran y son verdad cada una de ellas. Me hiciste...darme cuenta de la realidad. 

* Suspiro*

- aquí , en la distancia...las cosas parecen estar lejos, como si no existieran...pero existen. Y la realidad es una, no puede modificarse. No fue ningún acto despreciable, y si lo fue , fue mucho menos despreciable que el que yo iba a cometer. No lamentes algo así Amalya. Solo espero que la vida no te obligue a pasar por algo así para poder disfrutar de la compañía de tu hellren. Estoy a tu disposición para el castigo que dictamines.

AMALYA: *niego*

-el sufrimiento que muestras ahora es suficiente. Me siento saldada y esa es mi última palabra.

* Me levanto y la miro como se pone de pie lentamente*

- Cada uno elige como puede ser feliz Payne. Ojalá todos entendieran...pero como el mundo no es un lugar justo ni prevalece el amor a veces hay que tomar decisiones como estas.

Mientras tú estés segura que es Zypher con quién quieres estar lo demás pasará... y la gente que te quiere puede que se enoje por esto pero lo entenderá... sabrá que esta es tu felicidad.

* Me encojo de hombros cuando me mira raro

¿ Habré hablado de más? *

PAYNE: * Si fuese de las que lloran ya tendría las lágrimas cayéndome por las mejillas. Pero no lo soy y Zypher sacó de mi mucho de ese dolor y muchas lágrimas que deben ser derramadas*

- Nadie entenderá Amalya. No lo harán...por eso nos fuimos. No había manera mortal de que él y yo estuviéramos juntos siendo quienes éramos. Mi hermano es un gran problema y su Sire también. Somos dos seres desgraciados que han decidido empezar de cero. Con nuestras familias no podíamos estar juntos, lejos de ellas...es nuestra única opción. Aunque signifique alejarnos de lo que más amamos.

* La pena me sobrecoge pero ahora ya no me atenaza ni me martillea el pecho, ahora la vivo como debe ser...como lo que es. No como una losa en mi espalda. Levanto la sabana para cubrir mejor mi desnudez y mis heridas aun frescas, pero Amalya no se ha dado cuenta de ellas, así que me relajo*

- Si ese es tu dictamen lo acepto. Tuya es la misericordia de la gran madre y de las hermanas . Gracias Directriz. 

* Hago una reverencia*

- Debo irme a mi habitación a vestirme, si no te importa. Considérate en tu casa.

* Y me incorporo marchándome hacia mi cuarto, pensando en lo reconfortante que es a veces confiar en los demás*

AMALYA: * la veo irse y me levanto observando el lugar por donde se fue.

Me abrazo a mí misma sabiendo que este camino no iba a ser fácil pero tenía fe que todo iba a arreglarse.

Me doy vuelta y salgo por una de las puertas hacia la noche para mirar las hermosas luces *

CONTINUARÁ.

 Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.