JANE: Acostada en la cama pienso en las noticias que habíamos recibido, tardaron pero llegaron.
Wrath nos había llamado y a la hermandad dándoles a conocer la noticia de la disculpa pública del macho que había querido atacarme en la clínica de Havers. Además de aceptar la culpa por haber querido herir a la shellan del hermano que los había ido a ayudar y los nombres de los otros implicados. Sin mencionar las disculpas del director del establecimiento también y como confirmó los hechos.
Lo mejor era que iba a haber alguna sentencia para ellos debido a haber acusado y omitido información.
En toda la reunión me quede en blanco, sabía perfectamente que Vishous podía leerme por lo que simplemente aprendí a no pensar las cosas delante de él.
Ahora que estaba sola en nuestra cama podía sonreír.
Pude hacer algo de justicia, no como la hubiera querido pero algo es algo.
No era tonta, sabía que esto podía traer implicaciones pero aceptaría las consecuencias. Nadie se metía con el macho que jure amar, y la protección venía de la mano con el amor.
Puede que mi hellren se enoje si alguna vez se entera de esto y como me expuse a su madre pero no me arrepentía.
Mis pensamientos van a Payne y cómo me ayudo, le debía una muy grande a mi cuñada. Sin pensarlo agarro el celular y le mando textos diciéndole todo lo que paso. Los borro inmediatamente luego de asegurarme que los recibió.
Cuando dejo mi móvil, miro mi mano y la veo casi transparente.
Volví de la muerte por Vishous, haría cualquier cosa por él o sus hermanos y si la madre de la Raza los ignoraba tal vez era hora que los que estamos aquí cambiemos cosas.*
CONTINUARÁ...
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