jueves, 20 de diciembre de 2012

( Universo paralelo: sección de fics ) Zypher y Payne. Dos Minutos para la medianoche. ( capitulo 13, parte III )


ZYPHER: * Después de que Vishous se desmaterialice, yo hago lo propio y me encamino a comprar los regalos y algo de comida, por que aunque mi shellaan se esfuerza mucho, definitivamente la cocina no es lo suyo, y ya que estamos, lo mio tampoco.
No es lo mismo cazar algo, despellejarlo y meterlo a una olla para que cueza, que pelear con esos chismes llamados vitroceramicas...



Llego a casa y la encuentro poniendo la mesa y sonrío al verla.
Esta preciosa, vestida con sus pantalones de cuero y un jersey de cuello vuelto y soltando los paquetes, me acerco por detrás y beso su cuello dulcemente, mientras rodeo su cintura con mis brazos.*

PAYNE
: - ¿que es eso nallum? un árbol que se asustó al verte- * corro a sus brazos cuando veo el desconcierto por mi comentario y beso sus labios*
- Era broma Zypher....me parece el mejor árbol del mundo.- * Te rodeo fuerte con mis brazos y beso tu cuello*
- Has tardado mucho. ¿Donde estabas? -
* Omito el decirle que yo también he salido en su ausencia, como si el diablo me persiguiese. Navidad significa regalos y yo no había pensado en ello. Y Zypher se merece todo lo que pueda darle. Su familia de bastardos no es posible, pero he ido en busca de algo que dijo un día que le gustaría tener. Veo que trae mas cosas además del arbol.*
- Dime que trajiste de comer Nallum. Acabo de quemar el pavo que tenia en el horno. Iba a hacer un sobre de sopa deshidratada-


ZYPHER: * Sonrío y le enseño las bolsas con comida. Pavo al horno, patatas asadas, y un montón de chuminadas mas para comer.*
- Si, si que he traído comida, pero seguro que esa sopa deshidratada, la podemos comer de primero y sabe divinamente.

* Distribuyo la comida en bandejas y las voy colocando en la mesa a medida que hablo y sonrío girandome.*

-Tenemos que poner los regalo allí, debajo del árbol, nalla.

* Me sobresalto un poco al oír que alguien pica con los nudillos la puerta y cierro los ojos, sonriendo para mi mismo.*

_ ¿puedes abrir mientras termino con esto? Seguro que son niños humanos pidiendo el aguinaldo.

PAYNE: -¿Aguinaldo? ¿Eso que es? Mejor abres tu cariño.-

* Me encojo de hombros y me dispongo a coger las bolsas de comida para llevarlas hacia la cocina. Las de los regalos las dejo cerca del árbol. Corriendo cojo mis paquetes, que estaban detrás del sofá, y el dejo junto a los que ha traído Zypher. Con un poco de suerte, no se dará cuenta hasta el final de la sorpresa.

Me doy prisa y entro en la cocina con la comida y empiezo a distribuirla en las fuentes que compramos Zypher y yo cuando decidimos empezar a parecer una pareja normal.
Me entretengo calentando las fuentes en el microondas, y retiro la sopa de la vitrocerámica. Digo a voz en grito para que me oiga desde el salón*

-¡¡¡ Nallum!! La sopa la dejamos para otro día. No pega ni con cola con lo que has traído!_

* Y miro los platos. Si que tiene hambre Zypher, hay comida para al menos cuatro personas. Dulces aparte.

Oigo como la puerta de la calle se cierra y me imagino que Zypher debe haber despachado ya a los niños.

- ¡Salgo en un segundo! _

* Le anuncio a Zypher mientras voy decorando las fuentes que no están en el microondas*


ZYPHER: - Está bien...Ya abro yo...

* Sonrío y abro la puerta. Sé que es Vishous por que le huelo, y parándome en el quicio de la puerta, lo cubro todo lo que puedo, para que mi nalla no lo vea antes de tiempo.
La oigo gritar desde la cocina que hay comida para cuatro y me retiro, haciéndolo pasar adentro y le tiendo la mano, apretándosela mas de lo normal, recordándole mi advertencia, de que si la daña, sea como sea, pienso ponerle sus propias tripas de collar.*

-Nalla, hay comida para cuatro...pero es que somos tres...

* Digo apartándome y dejándole vía libre a Vishous.*

PAYNE: Oigo a Zypher y frunzo el ceño.
- ¿como que tres? -
* Pregunto saliendo distraída de la cocina con la fuente del pan que estaba cortando en la mano y me quedo petrificada al ver mi hermano frente a mí en el salón. Zypher esta a su lado, observándome sonriendo, tranquilo, sereno...con cierta preocupación y mucha curiosidad en su mirada.
Vishous.
MI hermano me observa en silencio, taladrándome con sus ojos idénticos a los míos. No me abalanzo con violencia sobre él porque veo que Zypher está relajado y de repente me acuerdo de la conversación que hemos tenido él y yo durante el día.
Vishous está de la misma forma que le recordaba. Tiene ese rictus de seriedad que le caracteriza...pero no veo la crueldad de la última vez en su mirada.
Parpadeo al mismo tiempo que siento mi corazón arremeter contra mi pecho. Y me doy cuenta que se me ha caído la fuente en el pan en el suelo .Ni me he dado cuenta. Casi no veo los trozos de pan al ponerme de cuclillas para recoger lo que se me ha caído porque de repente los ojos se me han anegado en lágrimas. No, no y no. Jure que no lloraría ni una maldita lágrima más por él y no lo haré. Veo unas botas acercarse a mi y levanto mi mano sin levantar mi vista, No va a verme llorar.*

– Alto, puedo hacerlo sola-

* Recojo uno a uno los trozos que han caído y cuando tengo la cesta llena, sorbiendo por la nariz para contenerme, me levanto sin mirarles siquiera, dejando que mi cabello oculte mi rostro. Me pongo de espaldas a ellos y me dirijo rápidamente hacia la cocina, el lugar donde no tuve que salir hace un minuto.

– Ahora vuelvo... quedaos aquí y sírvele algo a mi...al hermano de la daga negra-

*Es lo único que se me ocurre decir. No puedo afrontarle ahora...ahora no. Tengo que recobrar la compostura y después ya le encararé como pueda, me digo a mi misma restregándome los ojos tratando de no llorar ni siquiera en la cocina ni a solas. ¡Maldita sea ser una jodida hembra plagada de hormonas!*


VISHOUS: *Zypher abre la puerta y nos saludamos fríamente. Esta clara su advertencia. Entro en el apartamento, la verdad me sorprende ver lo bien que está por dentro dada cuenta de que está en uno de los suburbios de la cuidad. Pero la decoración es exquisita y cuidada con esmero. Se nota el toque de Payne.
Y allí está ella, la miro fijamente esperando que me ataque en un arrebato de ira u odio pero se queda tan en shock que hasta se le cae el pan de la cesta que lleva entre las manos. Se agacha de forma poco natural, está rígida, como también lo estoy yo. Me acerco a ella para ayudarla a devolver el pan a la cesta pero me detiene. Sé que está llorando. Mierda, ¿qué se supone que debo hacer? Debería existir un jodido manual para abordar este tipo de situaciones*.

-Payne yo…-

*No me deja ni hablar sale corriendo a la cocina llorando. Miro a Zypher que aprieta fuerte su mandíbula. Hermano de la daga negra, de la daga negra. Ahí está el quid de la cuestión no me ha llamado su hermano de sangre. No sé que esperaba ¿una reconciliación como en las putas películas en plan abrazos y besos desde el primer segundo? Nah, mi vida siempre había sido complicada, no sé por qué esto iba a ser diferente*.

-Creo que no va a funcionar, Zypher. Es mejor que me marche-
*Zypher me agarra del brazo furioso y tira de mi para meterme en un salón, me zafo de su amarre de un tirón y le miro amenazante*.
-Ni vuelvas a tocarme-


ZYPHER: - Como se te ocurra marcharte ahora, no solo voy a tocarte, si no que te mataré y me desharé de tu puto cadáver...Nadie sabe que estas aquí, ósea que entra ahí dentro con tu hermana y habla con ella ahora mismo.

* Furioso le corto el paso a la salida y lo agarro del brazo. *

-¿Que esperabas? Un beso y un abrazo?? ¡¡ La repudiaste,  joder!!! Ósea que entra ahí dentro y arréglalo. Yo no puedo estar con los míos, pero ella te tiene a ti, y te quiere.... Y aunque me gustaría que salieras por esa puerta y no volvieras jamás, no puedo dejar que lo hagas.
Esta noche es Navidad, y quiero que por una vez en su vida, ella sea completamente feliz. Que los dos machos a los que mas ama estén con ella, apoyándola y diciéndole lo mucho que la quieren. ¿Ok? Pues ale...tira para adentro, que yo voy a terminar de poner la mesa, y dame eso que llevas debajo de la chaqueta, que lo ponga con los demás debajo del árbol.

* Aprieto los dientes y cojo el paquete que Vishous me tiende.
Si las miradas mataran, yo ahora no seria mas que un puto fiambre encima de la alfombra del salón, pero si mi nalla quiere a su hermano, no se va a marchar a no ser que ella misma lo eche a patadas.*


PAYNE:
* Con las manos sobre la encimera respiro profundamente intentando tomar el control de mi cuerpo, de mi mente...joder, de mi misma.
No se cuanto tiempo pasa mientras intento calmarme y hago que las malditas lágrimas desaparezcan de mis ojos.

Cierro los ojos y trago saliva cuando le huelo a mi espalda. Bien, mis intentos de que no me viera llorar no han dado su fruto por la incertidumbre que huelo en él. Conociéndole, venir aquí le debe haber costado más de lo que aparenta. Y a Zypher debe haberle costado esto su vida intentarlo...literalmente.

Me doy la vuelta para encararle, apoyando mi espalda en la encimera, y sujetándome a ella con las manos, vamos...como si el trozo de madera fuese mi salvación. No estamos en un naufragio...estoy frente a la persona que mas me afecta en este mundo. Lo que es peor.

Nos miramos durante un buen rato, sin abrir la boca ninguno de los dos. No me atrevo a abrir mi mente para él ni recibo tampoco nada de su parte. El partido en tablas. Bien, MI Zypher no se ha jugado la vida por nada.*

- Solo necesito saber una cosa. Deduzco que si estas aquí son porque aparte de que Zypher te ha traído, es porque ha cambiado tu forma de verme. Así que solo necesito saber una cosa: ¿Puedo o no puedo llamarte “hermano”?-

*No hace falta recordarle que fue él el que tomo la decisión de que ya no lo era. Es el macho más inteligente del planeta, así que las explicaciones sobran.*


VISHOUS: *Estoy parado como un lelo delante de una de las personas más importantes de mi vida y no sé qué decir. Las palabras quieren salir de mi boca pero no sé exactamente cómo, soy un inútil, este tipo de sentimientos y reacciones me sobrepasan. Hasta que las palabras de Payne hacen que algo se rompa dentro de mi. Hermano. Eso era lo más importante, la familia. ¿Cuántos siglos había estado vagando solo buscando la muerte para que cuando al fin encuentro los pilares de mi vida derruirlos? Esta vez no, ni en broma*

-Deberías hacerlo porque nunca quiero dejar de ser tu hermano-

*Y hago algo que ella no se esperaba, el abrazo. Me fundo con ella en un abrazo fuerte y empiezo a llorar. Joder, si, los ojos se me empañan y las mejillas se me humedecen. Intento recobrar la compostura pero no puedo. Me ha faltado una parte de mi estos meses, mi gemela, mi Payne y ahora estoy ahí abrazado a ella pidiendo una segunda oportunidad. Sé que ella también está llorando, palmeo su espalda y la pego más a mi para consolarla*.

- Menudo hermano tienes que lo único que te provoca son lágrimas. No me merezco tu perdón, aún así soy tan arrogante de pedirlo. Lo siento, Payne-


PAYNE: * Me dejo abrazar porque eso es lo que necesito. Atrás han quedado de golpe estos meses de separación, de mantener entre nosotros un muro de ignorancia y hielo.
Necesito abrazarle con fuerza y hacerle saber que estoy ahí. Que siempre he estado ahí. Ahora ya no puedo contener las lágrimas, pero me sorbo la nariz oyendo perfectamente su corazón martilleando en su pecho, confirmando que está tan emocionado como yo. Cuanto oí yo ese corazón mientras crecimos en el vientre materno, mientras dormíamos juntos siendo unos niños las siestas después de las horas de juegos. Hasta que se lo llevaron de mi lado. Cosas que yo recuerdo como si fueran ayer y que él no recuerda *
- Más lo siento yo Vishous. No supe ser la hermana perfecta cuando por fin volvimos a encontrarnos. No se ser una hembra a la usanza. – * Me froto los ojos*- Y no son lágrimas, solo es la cebolla que estaba cortando-
* Me separo de él y me froto las mejillas húmedas mirándole sonriendo por primera vez en mucho tiempo, aun temerosa de que esto no sea más que un estúpido sueño. Me desgarra el alma verle igual que yo, con lágrimas en los ojos. Es el mejor de los guerreros que conozco, mejor que mi padre. Y froto también su mejilla con mi pulgar, con la misma emoción que en las mías*
- Igual que a ti te afecta, hermano...la cebolla provoca estas cosas en la cocina- * Intento disimular para ambos. Me conozco a mi misma y si él es una decima parte de lo que recuerdo, esto debe estar costándole más que a mí. No pienso hacer que mi hermano se rebaje ni pierda la compostura conmigo. Le amo demasiado para dejar hacerlo.*
- Así que...Zypher te convenció para que vinieras esta noche. En navidad. Muy propio de mi nallum el no decirme nada y jugarse la vida por mí. Porque estoy segura de que no le recibiste con los brazos abiertos-


ZYPHER: * Dispongo los platos, cubiertos, copas y bandejas con comida a lo largo de la mesa y sonrío cuando les oigo y se me hace un nudo en la garganta al oír como ambos se ponen a llorar, y no soy consciente de que los grandes manchurrones que están mojando el mantel, son mis propias lagrimas.

Lágrimas de emoción, por la felicidad de mi shellan, pero también lágrimas de añoranza hacia mis propios hermanos, y suspiro girándome hacia el árbol y colocando el resto de regalos que he traído.
Solo espero que Vishous no me haga tragarme el suyo cuando se lo de.*

-¡¡¡ Familia!!! La comida esta en la mesa!!!

* Grito haciendo que ambos se sobresalten y rio cuando el, me apunta con la pistola, que aparece en su mano casi como por arte de magia.*

- ¿quieres dejar de intentar matarme a cada cinco segundos? Coño, que es Navidad...

* Sonrío hacia ellos y me seco con la palma una ultima lagrima solitaria que tengo en la mejilla y me acerco a mi nalla, rodeando sus hombros con mi brazo y la aprieto protector contra mi pecho.*

-Venga.. Vamos a comer, que se enfría, y luego, abriremos los regalos. Y espero que te hayas traído suficiente tabaco de ese de liar que llevas siempre, V, por que luego nos vamos a beber esto.

* Digo sacando una botella de Goose.*

- No me mires con esa cara... Le pregunte a Xhex que es lo que sueles beber habitualmente.

VISHOUS: *Guardo el arma*
-Está bien, está bien. Estoy siempre alerta solo es eso-
*Mis ojos se fijan en como Zypher pasa su brazo sobre los hombros de Payne de manera posesiva. Pero en el fondo no me incomoda como antes, ya no. Sonrío cuando veo la botella de Goose en la mano de Zypher y pienso en esa sympath que da demasiada información. Ya hablaría con ella más adelante. *
-¿Sólo una botella? ¿Eso es para empezar, no? Tranquilo creo que tengo tabaco de sobra-
*Me acerco a la mesa. Alcanzo una silla y la muevo para que se siente Payne pero Zypher hace lo propio muy caballero para que ella se siente. Los dos nos miramos midiéndonos. Payne nos mira sin saber qué hacer porque no quiere hacer el feo a ninguno de los dos. Creo que se oye hasta el tic tac del reloj contando los segundos del duelo pero al final cedo y me aparto. Payne ha elegido a su macho y no me tengo que interponer. A él es al que le corresponde cuidar ahora de ella. Nos sentamos a la mesa, y pensando en el regalo que he traído miro el lugar donde está junto al resto y me sorprende ver que hay bastantes*
-¿No te has pasado con las compras Zypher? ¿A quien le has robado la tarjeta de crédito?-


PAYNE: * Sonrío mas tranquila y tengo hasta ganas de explicarle cosas *

- No nos hace falta robar a nadie Vishous. No se si Zypher te lo ha contado pero ahora trabajamos por cuenta propia. Tenemos una empresa y todo. No quise tocar ni un centavo de tu dinero. Que sigue intacto en el fideicomiso -

* ¿Regalos? De repente caigo que no hay ningún regalo para mi hermano en las compras que hice hoy. Cuando ha sacado la pistola apuntando a Zypher el corazón se me ha encogido, pero gracias a Dios solo han sido los reflejos de siempre de V.

Protegiéndome.

Y entonces recuerdo aquello que compulsivamente compré en una subasta hace ya semanas cuando acompañe a un miembro de la Glymera, custodiándolo. Me enamoré del lote numero dos y no pare hasta conseguirlo, aun cuando no tengo ni idea de cómo usarlo. Ahora entiendo el porqué de aquel impulso y que no estaba predestinado para mí. Sabia que en algún momento podría dárselo, mi subconsciente trabaja ajeno siempre a mi consciente. Me levanto de golpe con una sonrisa cómplice*

- Id empezando y por favor, que los dos sigáis de una pieza y sin nada mas en el cuerpo que comida y bebida cuando vuelva. Solo tardaré un minuto y vuelvo, se me olvido algo en la habitación-

* Y salgo corriendo. Si no me equivoco también he dejado allí lo que me ha sobrado de papel de regalo.
Tardo solo tres minutos en envolver el regalo. Cuando vuelvo, con el corazón alegre, están los dos mirándose el uno al otro y me coloco la mano en el pecho al ver una estampa ante mis ojos que no creí que viera nunca. “no estas soñando” me repito mentalmente una y otra vez mientras me siento en la mesa redonda que Zypher ha preparado casi como si lo hubiera hecho el servicio de un doggen. *

ZYPHER: * Sonrío en cuanto veo a Payne volver con un regalo de mas y disimuladamente miro debajo del árbol, pensando en el regalo que he comprado yo para su hermano, pensando que ella no tendría nada que darle y sirvo tres copas de champan mientras comemos.

La velada trascurre tranquilamente y cuando terminamos de comer, saco los helados que he comprado de postre, y sirvo uno para cada uno, relajándome en mi silla y extendiendo la mano por encima del mantel para acariciar la mano de mi shellan.

La miro embelesado, y su felicidad al estar con su hermano es contagiosa. Miro mi reloj y me levanto de un salto.*

- Dos minutos para medianoche...Es la hora de los regalos.

* Me acerco al árbol y escojo los paquetes que he comprado para cada uno de ellos y me siento de nuevo en la mesa, cogiendo el cigarrillo liado que V me tiende.*

- Esto es de parte mía y de Payne...

* Le digo a Vishous cuando coge su paquete extrañado.*

VISHOUS: *Payne entra con un regalo que me hacer fruncir el ceño. Eso es lo malo de celebrar según qué fiestas, el tener que abrir regalos porque regalar no me importa pero toda esa parafernalia de todos mirándote a ver que cara pones cuando abres el tuyo me sobrepasa. Le paso un liado a Zypher que se lo enciende, cuando voy a hacer lo propio con el mío me pone en las manos un regalo, mi regalo*

-Creo que es mejor que lo abra después de los vuestros-

*Se lo tiendo pero el bastardo insiste acercándomelo a mí. Payne me mira dándome ánimos para que lo abra*

-Mierda, no me gusta abrir regalos-

*Empiezo a romper el envoltorio para encontrarme con una caja de piel. Elevo mi ceja interrogativamente*

-¿Qué se supone que me has regalado, Zypher?-

*Y con curiosidad voy abriendo la caja*

ZYPHER: * Me echo hacia atrás en la silla, mientras exhalo el humo del cigarrillo y me sirvo otra copa de Goose.

Miro a Vishous alzando una ceja, y aprieto la mano de mi nalla, que se sienta a mi lado, con una sonrisa que parece iluminar toda la habitacion.*

- Tu ábrelo y alucina, chaval... No son tan guay como las que tú haces, pero seguro que te molan.




* Cojo la mano de Payne y con ternura, deposito un beso en la palma de su mano. Me siento relajado por primera vez en presencia del hijo del Bloodletter y cierro los ojos por un momento, rememorando el campamento y una fina arruga se forma en mi frente mientras intento disipar los recuerdos, que duelen demasiado.*

PAYNE: * Levanto una ceja cuando Vishous abre la caja y saca su contenido y siento los labios de Zypher en mi mano. Sus ojos reflejan dolor en un breve momento y acaricio su mejilla. Pero está relajado. Mucho más que otras veces. Pero su aura no esta brillante del todo. Le hacen falta los suyos, y nada quiero mas que ver a Zypher feliz completamente, como él ha hecho conmigo*

-Veo que mi Nallum y yo pensamos en lo mismo...incluso al pensar en ti y en tus gustos-

* levanto la cabeza para ver mejor y el filo de una de las dagas brilla con fuerza. La belleza del filo es atrayente*

- son hermosas...-

* Digo sin poder quitar la vista del juego de dagas. Pienso en mi regalo, y en si le gustará o no. Alargo mi brazo y acerco mi paquete alargado hacia él*

- La encontré en una subasta y data del siglo XVIII. Es una Wakishazi -

* Incomprensiblemente estoy nerviosa por su reacción*

VISHOUS
: *Levanto las dagas a la luz para observar el corte del metal y sus proporciones. Son buenas, no tienen el grado de calidad de las mías pero son muy buenas. Sopeso el peso en mi mano*



-No sé quien las hizo pero son muy buenas y tienen un acabado en la hoja bastante aceptable. Gracias Zypher, me gustan-

*Payne me acerca su regalo diciéndomelo y me quedo helado*

-¿Una Wakishazi? No puede ser….

*La saco de su funda y me paro a admirar cada detalle. Era una wakishazi de verdad, no imitación, una original. Paso mi dedo por su filo y me lo corta*

-Es sencillamente impresionante. Siempre admiré a los samuráis. ¿Sabéis que dormían con una de estas al lado? Yo hago lo mismo con mis dagas. La reverencia a unas armas tan bellas como letales es fascinante, por eso aprendí japonés para entender mejor la cultura-

*Miro a Zypher y a Payne que me miran un tanto asombrados por mi reacción*

-Hermana, gracias no sabría como recompensártelo, me encanta. Bueno tal vez si-

*Me acerco a por mí regalo y se lo doy*

-Es algo que hice yo para que ambos lo llevéis, la inicial de la letra de vuestro nombre en el cuello de vuestra pareja. Me pasé toda una noche forjándolo-
*Observo cada reacción mientras se quedan mirando ambas iniciales*




PAYNE:
* Aun emocionada por su reacción ante la espada corta japonesa....aliviada hasta la médula por haber acertado, abro los ojos como platos cuando saca su regalo y nos dice lo que es. Estiro mi mano al ver las letras con miedo a tocarlas. ¡Dios Mío! Ese pequeño trozo de metal es más valioso para mí que todos los diamantes juntos en el mundo. Temblándome la mano, cojo la letra en forma de Z y la acaricio mientras se me empañan los ojos*

- ¿Las hiciste tu mismo? -

*Su asentimiento es breve pero ilumina su mirada .Miro con amor a Zypher sonriendo como una boba mientras veo como él coge la P en su mano. Una risita nerviosa es todo lo que consigo decir en este momento, la voz quebrada por la emoción no me deja articular mucho más. Me levanto sin pensarlo y hago lo que he querido hacer desde hace rato...sé que no acepta el contacto físico de buena gana pero ahora quiero y necesito hacerlo. Me arrodillo a sus pies sonriendo como una boba, con los ojos anegados y le abrazo con fuerza dándole un sonoro beso en la mejilla, dejando que su calor inunde el frío que había en mi corazón. Su cuerpo cae hacia a tras por el ímpetu de mi abrazo y mi peso de guerrera. Noto como duda entre que hacer y cierro los ojos agradecida cuando siento como me acaricia el pelo. Me separo de él para mirarle a los ojos y su sonrisa me llena el pecho de un calor maravilloso. Me paso las manos por los ojos disimulando. Hay que ser fuertes...estamos entre guerreros.*

- Gracias Vishous...gracias por estar aquí y aceptarme y....¡¡¡Gracias ¡!-

* No puedo decir mas y me levanto porque no quiero montar mas drama y me doy la vuelta para prestar mi atención a Zypher que me mira con ojos brillantes*

– Nallum, tu aun no has abierto tus dos paquetes-


* Sonrío como una niña emocionada y mi mirada va de mi hermano a mi Nallum. Estoy con aquellos dos que mas amo en el mundo... y es Navidad. Le debo una al dios de los humanos. *


ZYPHER: * Con un ligero temblor en las manos, cojo la pequeña letra y la miro como si fuera lo mas valioso del mundo, y en cierto modo lo es, por que yo nunca había  tenido regalos, no hasta que conocí a Payne y sonrío pasándome la cadena por el cuello y orgulloso la muestro.*

- Esto es una pasada... Ven, nalla, que te ponga el tuyo... Solo espero que no se me enganchen los colmillos con la cadena.

* Rio y tras ponerle la Z, cojo dos paquetes mas y rasgo los envoltorios. ¡DIOSSSSSSSSSS!




* Cojo los brazaletes de cuero con nuestros nombres y me los pongo, admirándolos y alzo la mirada hacia el otro paquete.



La chaqueta de cuero, la camiseta y los guantes, me dejan medio extasiado y me levanto para probármelo. Me queda todo perfecto y rodeando a Payne entre mis brazos, la beso dulcemente.*

-Es todo perfecto... Perfecto del todo. Como tu...
* Se oye una ligera tos y un carraspeo y de reojo miro a Vishous que se sirve mas Goose y se lía un cigarrillo y le tiendo mi paquete a Payne*

- Toma, Nalla.... Feliz navidad... La segunda parte del regalo, te la daré luego... a solas-

* Rio y me siento de nuevo, sirviéndome más bebida y esperando la reacción de mi shellan cuando vea sus regalos.*

VISHOUS: *Que no me falte alcohol porque con tantos cariños y apelativos que Zypher y Payne se profesan me dará una subida de azúcar. Intento apartar mí vista de ellos, dándoles intimidad, la verdad me siento un voyeur. Carraspeo y me enciendo otro liado mientras Zypher le entrega a Payne sus regalos. Sonrío por la ilusión que veo en los ojos de Payne, está feliz y eso me hace a mi feliz. De repente oigo el pitido de mi móvil. Lo saco y veo que la llamada es de Butch.*

-Disculpadme un momento-

*Me levanto y me retiro a la cocina*

-¿Poli? ¿Todo bien?-

*Se oye la voz de Butch preguntándome preocupado dónde estoy*

-Estoy bien, no me he metido en ningún lio-

*El poli gruñe y me dice que todos están preocupados y que tengo que volver*

-Que no se preocupen, responderé a todas sus preguntas después. No tardaré. Nos vemos-

*Corto la llamada y vuelvo al salón, ambos me miran interrogativamente*

-Todo bien. ¿Y esos regalos, Payne?-

PAYNE:
* No atino a agarrar los regalos cuando me doy cuenta de la realidad cuando Vishous responde a la llamada. Todo esto que estamos viviendo es un pequeño trocito de felicidad que durará lo que dure la cena. En una noche, que los humanos consideran mágica...yo ya he conseguido mi magia. Mi hermano ha venido, me ha abrazado y me ha llamado hermana. Para mí ya es suficiente. Cuando salga por esa puerta...volverá al mundo real en el cual un rey que ha sido mi mejor amigo, sólo piensa en como hacerme desaparecer de su mundo, a mí y a mi Nallum. Y me considera una traidora.

Me resigno a disfrutar aunque solo sean unos minutos y me concentro en el paquete que me ha dado Zypher. Zypher. Él es mi alegría permanente, la que esta conmigo pase lo que pase, y me ama por encima de todo. Cuando vuelve Vishous le pongo la mejor de mis sonrisas.

Arranco el papel de un tirón y cojo con mis manos lo que hay dentro. Ya vuelvo a tener los ojos brillantes*

- ¡¡Por todos los Dioses, Zypher!!- * Le doy la vuelta por delante y por detrás inspeccionando la prenda*... ¿Como es que te acordaste? Es el que vimos en esa tienda tan cara el primer día que...-* no digo en voz alta el resto de la frase. Zypher sonríe como un niño malo asintiendo y a Vishous no le interesa saber que en esos días no teníamos ni para comer. Me lanzo a los brazos de mi Nallum excitadísima tanto en cuerpo como en alma*

- ¡¡¡Gracias, gracias Nallum!!!-

* Oigo a mis espalda como Vishous carraspea, y me separo de Zypher sin dejar de observarle con una promesa tácita de lujuria posterior, cuando estemos solos*

- Lo siento Vishous...no estamos acostumbrados a estar con gente. -

* Coloco mi mano sobre la de mi hermano y le miro a los ojos*

- Gracias por venir...sé que esto ha sido un gran esfuerzo para ti y que te traerá problemas si se sabe, así que...tanto por nuestra seguridad como por la tuya, no digas a nadie que estuviste aquí. Ni siquiera sabes donde vivimos, ¿Entendido? No pienso poner en peligro a Zypher por esta noche. Ni por esta, ni por ninguna.-

* El teléfono móvil de Vishous vuelve a sonar. Le requieren de nuevo. Intenta excusarse con la mirada. Asiento con la mía*

- No te preocupes. Tienes un deber y una hermandad a la que volver. Ves y que los Dioses y el destino te acompañen, hermano-

* Me levanto para facilitarle las cosas*

ZYPHER: * El abrazo efusivo de Payne, manda toda la sangre de mi cuerpo directamente a mi polla, y con un carraspeo me separo, guiñándole un ojo. Miro sus ojos diamantinos y con la voz ronca susurro:
- Luego, Nalla...

* Miro hacia Vishous y sonrío, viendo como coge sus regalos y le tiendo una bolsa para que los guarde.*

- No has estado aquí, y nosotros no te hemos dado eso.... Y Vishous... Ven un segundo.

* Lo llamo antes de que salga por la puerta.*

- Prométeme, que seguirás llamándola. Por favor. No la dejes ahora que os tenéis de nuevo. Se lo que es echar de menos a un hermano, y sé que esta vez, el dolor de perderte de nuevo, la mataría.

* Susurro cerca de su oído mientras aprieto su mano. El levanta su vista y siento con la cabeza y me aparto, yendo de nuevo hacia mi nalla.

Rodeos sus hombros con mis brazos y la atraigo hacia mi pecho, besando su pelo y sonrío feliz, por lo ocurrido esta noche.*

Vishous se para unos segundos en el quicio de la puerta y nos mira, con una ligera sonrisa apenas perceptible en su rostro.

Abrazo mas fuerte a mi hembra y miro al vampiro, modulando la palabra GRACIAS con mis labios.*

VISHOUS: -Tranquilos no revelaré a nadie ni al mismísimo Rey donde estáis aunque me lo pregunten, os doy mi palabra. Hermana, ten cuidado y cuídate-

*La abrazo y me separo para no ponerme sentimental. Agarro la bolsa con mis regalos y salgo por la puerta. Zypher se adelanta para pedirme que no me olvide de Payne*

-Es imposible que me olvide de mi otra mitad, Zypher. Imposible. Cuídala y no la hagas daño porque si no te mataré-

*El bastardo asiente y abraza a su hembra. Sonrío al verles abrazados y sonrientes. Vuelvo a apagar el puto móvil que no para de sonar y sonar*
-Tengo que irme, nos vemos-
*Me esfumo en medio de la noche con una jodida sonrisa en mi rostro y el corazón lleno de un cariño que no pensaba recuperar*


ZYPHER: * La puerta se cierra a sus espaldas y cuando Vishous se va, me giro hacia mi nalla, y con un movimiento rápido, la alzo del suelo, haciendo que me rodee las caderas con las piernas y la cojo por el culo para que no se me caiga al suelo y la devoro a besos, mordiéndola y marcándola con mi aroma.

Con cierta dificultad, llegamos a la habitación y la dejo caer en la cama, mientras me desvisto a toda prisa y saltando sobre ella, empiezo a reírme a carcajadas.*

- Nalla, esto si que es una Nochebuena como dios manda...y espero que ahora si que me aceptes como hellren,por que ya no tienes excusa,  aunque sea tu hermano solo, el que me marque tu nombre en la espalda. Seguro que el muy cabron, encima lo disfruta.

* Y riendo vuelvo a besarla, acallando sus protestas divertidas con mis labios.*

CONTINUA en Capitulo 14.



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