Layla y Xcor : Reencuentro por San Valentin.

LAYLA: *Hoy es el señalado día que los humanos llaman San Valentín y  después de la noche que pasé con mi guerrero Xcor, no he vuelto a verle, y angustiada por las noticias que me llegan sobre sus batallas con la hermandad, me anego en un mar de lágrimas, desmaterializándome en nuestro prado.

No me atrevo a llamarle.

Una vez más me considero indigna y traidora a la raza y dividida entre la lealtad a mi rey y mi amor por Xcor, lloro acurrucada bajo nuestro árbol rezando  para que mi nallum esté bien.

No he ido a la mansión para que Qhuinn no detecte su aroma en mí, y no soy capaz ni de llamar a mis hermanas ni a nadie.

Simplemente me limito a existir, y pienso en si el estará bien y a donde nos llevará todo esto.*

XCOR: Había dejado pasar una semana tras el incidente en la mansión de Assail, una jodida semana pensando y dándole vueltas a cómo afrontar la derrota. Se me había ido la noción del tiempo por desgracia aunque cada día tenía siempre en mi mente una hembra de rostro amable y elegante y pelo dorado cuyo cuerpo me volvía loco. Layla. ¿Qué sería de ella? Seguramente había oído lo de la batalla con los Hermanos. ¿Me culparía por todo? Cierro los ojos y dejo que su sangre me guíe. La localizo en el prado, en nuestro prado. Frunzo el ceño preocupado. ¿Cómo se la ocurre estar ahí sola? Me desmaterializo hacia allí. Aparezco justo para ver las lágrimas recorrer sus mejillas y como se abraza su esbelto cuerpo echada sobre el tronco del árbol. Me arrodillo a su lado*.

-Layla, soy yo, Xcor-

*Alza su cabeza y nos fundimos en un abrazo. Demonios, qué bien huele*.

-¿Qué pasa leelan? ¿Por qué estás aquí?-

LAYLA: * Jadeo ante la sorpresa de verle y me hundo en su pecho con un abrazo, apoyando mi mejilla contra su corazón y sin dejar de llorar, sonrío y alzo mis ojos hacia los suyos, acariciando su rostro.*

- Creí que te había perdido, mi amor... Supe que había capturado a uno de los bastardos y recé para que no fueras tú... Soy indigna, Xcor... No merezco que me ames, porque soy una traidora.

* Le miro a los ojos y siento que se me parte el corazón. Quiero ser reclamada por él y sé que deseo un imposible, porque si alguien se llega a enterar de esto, moriremos los dos, pero me da igual... Prefiero morir a su lado, que tener una vida sin el.*

- Te amo.... Te amo tanto que me duele, cariño... por eso lloro.

* Sonrío y acerco mis labios a los suyos, depositando un suave beso.*

XCOR: *Agarro su rostro y limpio sus lágrimas con mis dedos*

-No llores, leelan. Encontraremos una solución para estar juntos-

*La beso con devoción en su pelo aspirando su olor que me embriaga*

-¿Por qué dices que eres una traidora? ¿Acaso hacer lo que tu corazón te dicta es una traición?-

*Ella llora más fuerte pegada a mi pecho*

-Tranquila, Layla. ¿Se han puesto en contacto contigo el Rey o algún Hermano? Ha habido una batalla complicada….

*Sus manos se agarran fuerte a mí. Por la VE podría estar todo el día abrazado a ella y sentir que al final tengo un hogar*

LAYLA: * Niego con la cabeza, y le miro a los ojos.*

- Nadie se ha puesto en contacto conmigo...Solo Qhuinn me llamo para avisarme de que había habido una gran complicación en el baile de la glymera y que él y los demás estaban bien, y que habían cogido a uno de los malos.

* Sollozo y me aprieto el pecho, pensando que se me va a romper de pena.*

- Pensaba que te habían matado, Xcor... Y si tú mueres, yo no quiero vivir...
Hazme el amor, nallum...como aquella primera vez...

* susurro tumbándome en la hierba y con los ojos llenos de lagrimas.*

XCOR: -No te preocupes soy difícil de matar y vivo por ti, Layla……-

*Me tumbo a su lado y palpo su cuerpo. Dioses, como me gusta esta hembra*

-No me gusta ese Qhuinn, no me gusta ningún macho que esté rondándote. Dime que me amas, dime que no habrá ningún otro, que eres mía….

*Empiezo a lamer cada una de sus lágrimas saladas, mientras siento la necesidad de hundirme en ella*

LAYLA: * Acuno su cara cuando lame mis lágrimas y tiro de él, para situarlo encima de mí, cuando sus labios abandonan mis mejillas y se lanzan ávidos a por los míos.

Su aliento contra el mío, y la caricia húmeda de su lengua, disipan todo el miedo de mi corazón y abro las piernas, a medida que él me sube el vestido y jadeo, cuando sus dedos apartan la tela de mi ropa interior, y acaricia mi centro, ya húmedo y deseoso por tenerle en mi interior.
Con manos agiles, desabrocho su pantalón y su erección salta como un resorte, haciéndome gemir ante su calor, y sin perder más tiempo, le guio hacia mi entrada.*

- Eres el único, Xcor.... Te amo... y soy tuya... solo tuya, nallum...

* Gimo arqueandome cuando siento sus manos agarrando mis nalgas y se hunde en mí de un solo golpe.*

XCOR: *Me clavo profundo en ella de una forma necesitada y urgente. Empiezo a moverme en su interior a sentirme parte de ella. Me siento completo. Entero. El olor a macho emparejado empieza a flotar en el ambiente y gruño contra los labios de Layla que tan gustosamente me ofrece para ser besados*.

-Necesitaba tenerte así, leelan, te necesitaba tanto estos días…-

*Ella posa su boca en la mía y paro de hablar para que lo hagan por nosotros nuestras lenguas. No importa el lugar en el que estamos, ni el suelo donde nos echamos porque solo importa lo que sentimos y el placer que buscamos el uno en el otro.

Muerdo sus pechos tirando de sus pezones recorro su cuello con mi lengua mientras sigo bombeando en su interior y entonces ella tan solícita gira su cuello dándome acceso, mis colmillos se despliegan y caen sobre su nívea piel perforándola y haciendo que brote su sangre que absorbo con ansia*

LAYLA: * Con un gemido, envuelvo sus caderas con mis muslos y cuelo mis manos bajo su camiseta, arañando su espalda cuando siento sus caninos atravesar mi carne y noto como el calor de mi cuerpo se concentra en mi centro, oprimiendo su sexo cuando me corro con un jadeo enronquecido por el placer.

Sin darle ni tiempo a que cierre mis punciones, agarro su pelo y tiro de él, haciéndole que doble el cuello y esta vez soy yo quien clava mis colmillos en su garganta, marcándolo como mío.

Bebo de él, mientras empieza a moverse a más velocidad, haciendo que su roce y su sangre, enciendan la mía, y abandono su cuello para besar con avidez sus labios.

Rodamos por la hierba y me quedo encima, y le miro sonriendo cuando rasga mi vestido en dos y me deja completamente expuesta ante él.

Apoyo mis manos en sus hombros y empiezo a cabalgarle deprisa, mientras el aferra mi trasero con sus grandes manos.*

- Así, nallum...así...

* Gimoteo mordiéndome los labios y suelto sus hombros para retorcer mis pezones erguidos y excitados.*

XCOR: *Aún con el sabor de su sangre en mi boca y ella con el mío veo como se mueve encima de mi buscando su placer. Me encanta que me cabalgue como una amazona. Agarro sus pechos con mis manos y el aprieto fuerte, hago lo mismo con su culo que guio para que se empale más profundamente dentro de mí. Es magnífica, y es mía*

-Leelan, voy a correrme…..oh por el Fade….eres preciosa. Sigue, sigue-

*Baja fuerte introduciéndose mi sexo dentro de ella y moviéndose fuerte y con un grito exploto dentro de ella.

La miro con adoración como si cada momento que me brinda fuese especial que de hecho lo es ya que puede ser el último. Ella sigue moviéndose hasta que explota encontrando su orgasmo. Su cuerpo cae encima mía.*

-¿Estás bien?-

*Digo entre jadeos*

LAYLA: * Asiento entre jadeos mientras levanto mis ojos hacia los suyos y sonrío, apoyando mi cabeza en su pecho.

Le siento duro todavía dentro de mí y una sonrisa tonta se instala en mi rostro debido a la paz y tranquilidad que me proporciona el orgasmo tan intento que mi he brindado mi nallum.*

- Estoy perfectamente, Xcor... Ven conmigo a casa...

* le beso tiernamente y aparto los rizos sudorosos de su frente.*

- ¿que me dices de tu, yo y mi super bañera llena de espuma, guerrero?

* Me alzo, apoyando mis manos en su pecho y me aparto el pelo de la cara, para poder observarle.*

XCOR: *Sonrío de lado mientras aspiro el olor de Layla y la abrazo pegándola más a mi pecho para darla calor*

-¿Cómo quieres que me resista?-

*Pero pienso en mis guerreros y en que se estarán preguntando donde estoy. Pienso en la seguridad de Layla y…..mi mente se impone a mi corazón. Me incorporo y ayudo a Layla a hacer lo mismo. Tiene su vestido desgarrado y roto. Vaya me he dejado llevar demasiado por el momento. Me quito mi chaqueta y se la coloco en los hombros*.

-Layla, quiero que me mires un momento y atiendas bien-

*Ella me mira con su tierna mirada que me derrite mientras se cubre del frío con mi chaqueta. Apelo a todas la fuerzas que tengo para no irme con ella y dejarlo todo*

-Leelan, no puedo ir contigo. Tengo cosas que atender y no quiero que me vean rondar tu apartamento. Pero te prometo que pronto iré a visitarte, cuando sea más seguro. Ahora hay mucha vigilancia desde lo de la pelea con los hermanos. No es seguro-

*Ella se estremece y noto su tristeza y sé que es el momento de pronunciar las palabras que me queman por dentro*.

-Te amo, leelan. Te amo y mi vida es tuya. Solo dame un poco de tiempo hasta que las cosas se hayan calmado y estaré a tu lado. Por favor, créeme. Llévate mi chaqueta pero tan pronto como entres a casa tírala para que no la descubran ni descubran que has estado conmigo. He de irme. Lo siento-

*Beso sus labios por última vez y me desmaterializo rumbo al refugio. Siento que dejo atrás mi hogar, mi vida y lo que es más importante mi corazón. Pero no será por mucho tiempo, solo tengo que encontrar el modo de acabar con esa jodida Hermandad y poder estar así con la hembra que amo*.

LAYLA: * triste por su marcha, pero feliz por haber podido pasar unas horas con él, en este día tan especial,  me ajusto la chaqueta sobre mi cuerpo y me desmaterializo hacia mi apartamento, y sin hacer caso a su advertencia, me meto en la cama con la chaqueta, inhalando su aroma*

- Te amo, Xcor... Te amo...

* Susurro quedándome dormida, con su aroma impregnando mi piel, porque así es como debe de ser... Él es mío y yo soy suya*

CONTINUARÁ...

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