REVH: *El ruido del club se cuela, pese a lo
aislado, y supuestamente insonorizado, del despacho que Trez me ha prestado en
el Iron Mask… Desde luego debo dar bastante pena, porque no le hizo falta más
que verme el careto para arrastrarme hasta aquí… diciéndome que era lo mejor,
lo que recomendaba el doctor. Y. lo cierto es que, con mis dudas existenciales
actuales, acerca de mi horror a emparejarme y crear otro monstruo como yo… de
dejar a otra, hembra honorable, como lo fuera mi mahmen, marcada con mi maldición,
no paran de atormentarme, cada vez con más frecuencia, ahora que mi vida va
agotándose. Sí, quizá Trez tenga razón, y volver al trabajo de despacho, a los
antiguos hábitos, me venga bien para distraerme de tan obsesivos y funestos
pensamientos y pesares… Me doy cuenta de que llevo minutos tatareando el tema
principal de una película: un remake de un film británico, que vi en el blue
ray recientemente, y que viene al dedo para eso de volver a los viejos hábitos
o lo difícil que es abandonarlos; cuando escucho que llaman a la puerta http://www.youtube.com/watch?v=PZyTm5r44z8
*
-Pasa.
*digo sabiendo, enseguida, de quien se trata*
TREZ: *Pese a que es mi club, espero a que Rehv me invite a
pasar. Si hay algo que no soporto es la falta de cortesía. Entro, y, por un
minuto, es como si el tiempo no hubiera pasado y siguiéramos en el viejo INN...
Pero el presente es el presente, y mi viejo amigo está sentado tras esa mesa
solo para poder apartarle de lo que sea que está agriándole el alma y, por qué
no decirlo, el gesto. Lo cierto es que pensaba tenerle toda la noche enterrado
entre todo ese papeleo inútil, pero acaba de presentarse algo mucho más
interesante… Quizá volver a la acción sea lo que necesite. Del brazo arrastro a
ese algo… rubio, bonito, y entrometido: según ella es la detective, del
departamento de policía Aracnhe … Pero a mí solo me huele a otra mestiza
haciéndose pasar por una humana al estilo tipa dura ¿Otra Xhex? Ya quisiera
Xhex, y ruego con una media sonrisa porque nunca se entere de mi humilde
opinión, tener las curvas y los ojazos de esta*
-Rehv, esta señorita no termina de creerse que en mi club no pasa nada
raro… Quizá a ti te haga más caso.
*Veo como los ojos de mi viejo amigo diseccionan a la detective mestiza,
quizá algo más, pero yo no me meto… y, no me hace falta mirarla, sé que ella
hace exactamente lo mismo. Es mi club, por mi pueden estar jugando a sostenerse
la mirada toda la noche, yo no me moveré de aquí hasta que esa mestiza no se
marche convencida de que mi negocio está limpio, y no vuelva pisarlo jamás*
ARACNHE: *Me zafo del brazo del que me sujeta y alzo
la barbilla de manera orgullosa. El hombre detrás del escritorio me mira
fijamente, y en esta guerra de voluntades, yo no perdería. Trato de entrar a su
mente y por primera vez esto falla, no es que importara mucho. Me muevo, sosteniéndole
la mirada todavía y me siento en la silla que esta frente al escritorio. Sin invitación
alguna, no es que la necesitara tampoco. El hombre que me llevaba del brazo continúa
diciendo que su club es todo legal y toda esa mierda. Resisto poner los ojos en
blanco porque sería cortar el contacto visual con el hombre detrás del escritorio.*
-Soy Aracnhe, detective de policía. Estoy investigando varios casos de
desapariciones, y lamento informarle que todos estos casos tienen algo en común:
su club.
*me pongo cómoda en el asiento esperando la lluvia de mentiras.*
REHV: *Ya que la mestiza me miraba fijamente a mí, me doy
por aludido*
-Siento decirla. Agente...
*casi deletreo la palabra, mientras trataba de traspasar sus defensas mentales.
¿Qué haría un mestizo infiltrado en la policía de Cadwell, como si fuera una
humana?... ¿quizá lo mismo que otro haciéndose pasa por capo mafioso y de la
droga? Me auto replico, divertido, incluso sonrío por primera vez en días… un
punto para la señorita*
- que este no es mi club… Sino el de mi respetable amigo.
*digo, señalándole a la Sombra*
TREZ: *Con una amplia y amenazadora sonrisa, mostrándole mi
preciosa y blanca hilera de dientes, asiento ante la señorita*
-Y como dueño del local la aseguro que nada malo ocurre en este lugar… Y
créame que de lo contrario, yo lo sabría.
*me hidrato los labios pasando mi lengua sobre ellos. Es joven, pero
estoy segura de que no tanto como para no saber lo que soy… y lo que me gusta
hacerles a quienes son descorteses conmigo*
-Le rogaría que, si no está aquí por ocio, abandonase mi local… Hay
asuntos más importantes que atender, que las teorías policiales sin fundamento.
*Con la mirada le indico que será
mejor no importunarme más*
ARACHNE: *Ahora si pongo los ojos en blanco, a pesar
de la obvia amenaza que él representa. Nada malo con el lugar... cuan patético
se escucha eso. Trato de irme por otra línea de pensamiento. Si la Sombra me ha
traído aquí con el mestizo -porque salta a la vista que es como yo-, quiere
decir que hay algo más. Porque, vamos, si la Sombra es el dueño del local,
¿para qué demonios me trajo aquí? Le oigo decir que tiene mejores cosas que
hacer, así que sonrío ampliamente.*
-No tienes que quedarte aquí por mí.
*pongo mi cara inocente, solo para encogerme de hombros y sonreír,
porque ellos nunca creerían que soy una cosita inocente.*
-Puedes ir a hacer cualquier cosa que tengas que hacer. Seguramente
puedo conversar con tu amigo y a él no le importara.
REHV: *¿Así que ese engendro de sangre tan contaminada como
la mía quiere quedarse a solas conmigo?*
-Tiene razón, Trez. Seguro que tienes cosas más importantes que hacer…
Yo acompañare a la señorita a la salida.
*digo poniéndome en pie, y tras rodear la mesa, colocándome a escasos
centímetros de la “agente”. Con la educación y caballerosidad que a un miembro
de la Glymera se le exige, la ofrezco mi brazo*
-Si no le importa, agente.
*digo mientras veo a mi amigo esfumarse en silencio antes de que ella
responda a mi gesto*
TREZ: *me esfumo, ahora que se entiendan entre los dos...
sonrío de dentro para afuera*
ARACNHE: *Le miro con ojos interrogantes, pues no me
esperaba el movimiento. Hacia tanto tiempo que no estaba entre este mundo y sé
que debo andar con cuidado. ¿Porque elegí este caso de cualquier forma?
Mientras más lejos de esto mejor, estaba mucho mejor, considerando el hecho de
que ahora saben de mi existencia... después de todo lo que me costó
desaparecer. Oh, que tonta he sido. Pero bien, los casos con los humanos son
aburridos, necesitaba algo más para ponerme bajo control. Me pregunto si debería
aceptar la invitación. Una parte de mí, me decía que la ignorara. La otra sabía
que esto era un juego de ajedrez y que si aceptaba la invitación, comenzaba la
partida.*
~~Bien, que comience el juego. ~~
Me pongo de pie, aceptando su brazo, en silencio. Esperando a que me diga
cualquier otra cosa.*
REHV: *Con ella cogida del brazo, salimos del despacho que
me prestó Trez, y encaminamos el pasillo… En un minuto estaremos fuera del
local, y junto a mi coche* ¿Me permitirá acompañarla a casa, agente?
-No pongo en duda su valía… Pero déjeme pagarle con este gesto la pérdida
de su tiempo al visitar el limpio local de mi amigo.
ARACNHE: *Rio de buen humor. Ignorando por completo su
propuesta de acompañarme a casa.*
-¿De verdad crees que me he tragado toda la mierda de que no ha pasado
nada? ¿Me has visto la cara de estúpida?
REHV: *Sonrío, mientras la abro la puerta de copiloto*
-No le he visto cara de nada, agente… Solo de alguien reticente a seguir
los buenos consejos y modales de dos… respetables caballeros y hombres de
negocios.
*Seguí esperando a que entrara en el coche*
ARACNHE: *¿Entrar o no entrar? A veces toda la vida se
decide en un acto de estupidez y aquí iba yo directamente al mio.*
-¿Dos respetables caballeros, eh?
*otra vez vuelvo a reír, él era divertido a su muy rara forma.*
- Gracias.
*le digo, agradeciendo el gesto de abrir la puerta del auto para mí y
subo. Cuando cierra la puerta, pienso en todo lo que he investigado y en cómo
llegar a resolverlo. Mientras trato de aplastar el sentimiento de nerviosismo
que me ataca por estar tan cerca de alguien que es como yo.*
REHV: *Tras cerrar su puerta, rodea el coche y me introduzco
en el vehículo por la mía*
-Usted dirá, agente.
*le digo, rogándole que me indique la ruta hasta su domicilio*
ARACNHE: *Darle la dirección de mi casa es un acto
realmente suicida, pero ya que más da. No es como si tampoco estuviera
preparada por si me atacan en mi propia casa. Así que con la voz tan calmada
como puedo, le dirijo*
CONTINUARÁ.
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